Mitos y Verdades sobre la Ayahuasca: Una Perspectiva transcultural
- Giancarlo Biaggi
- 3 mar
- 5 Min. de lectura

La ayahuasca es una bebida producto de la decocción de la liana de la ayahuasca y las hojas de chacruna, de origen amazónico utilizada por diversas culturas indígenas como parte de sus sistemas médicos tradicionales. En las últimas décadas, ha ganado notoriedad a nivel global como una herramienta para la sanación física, emocional y espiritual, así como para el desarrollo personal. Sin embargo, su creciente popularidad ha dado lugar a la proliferación de mitos y concepciones erróneas que pueden generar expectativas irreales o riesgos significativos para la salud. En esta entrada, abordamos con un enfoque académico los principales mitos y verdades sobre la ayahuasca, destacando su contexto tradicional, sus implicaciones médicas y sus desafíos regulatorios.
Desmitificando la Ayahuasca
Desmitificando la Ayahuasca
1. La ayahuasca es una cura milagrosa para todas las enfermedades (Falso)
Este es uno de los mitos más difundidos. Si bien la ayahuasca ha demostrado tener potencial terapéutico en ciertos contextos, no es una panacea ni un sustituto de tratamientos médicos convencionales. Estudios han explorado sus efectos sobre la salud mental, particularmente en trastornos depresivos y ansiosos, pero su eficacia depende de múltiples factores, incluyendo la preparación del individuo, el contexto de la experiencia y la integración posterior.
2. Su consumo no requiere preparación previa (Falso)
La preparación antes de una ceremonia de ayahuasca, comúnmente conocida como "dieta", es fundamental en diversas tradiciones amazónicas. Esta implica restricciones alimenticias, abstinencia de sustancias psicoactivas y preparación mental y emocional. Desde una perspectiva médica, la preparación es esencial para minimizar riesgos asociados con interacciones farmacológicas y reacciones adversas.
3. La experiencia visionaria es imprescindible para la sanación (No es totalmente cierto)
La presencia de visiones no es un requisito indispensable para que la ayahuasca genere efectos terapéuticos. La sanación puede manifestarse a nivel emocional, cognitivo o somático sin necesidad de imágenes visuales intensas. Investigaciones sobre los efectos de la N,N-Dimetiltriptamina (DMT), principal alcaloide psicoactivo de la ayahuasca, han demostrado que sus mecanismos de acción van más allá de las experiencias perceptuales. Sin embargo cuando ocurren, son importantes tomarlas en cuenta y darles una integración simbólica adecuada.
4. Mientras más intensa sea la experiencia, mayor será su eficacia (Falso)
No existe una correlación directa entre la intensidad de los efectos y los beneficios terapéuticos. La experiencia con ayahuasca varía según la persona, la dosis, la composición química del preparado y el contexto de ingesta. Algunas personas experimentan efectos leves pero transformadores, mientras que otros pueden enfrentar procesos intensos sin obtener beneficios duraderos.
5. La ayahuasca es completamente segura porque es natural (Falso)
El origen natural de la ayahuasca no garantiza su seguridad. Como cualquier sustancia psicoactiva, conlleva riesgos, especialmente en personas con condiciones cardiovasculares, trastornos psiquiátricos graves o que consumen ciertos medicamentos. Se han reportado casos de crisis psicóticas, complicaciones cardiovasculares y reacciones adversas en personas con predisposición a trastornos psiquiátricos.
6. Su consumo es siempre placentero y positivo (Falso)
Las experiencias con ayahuasca pueden ser emocionalmente desafiantes. La planta puede inducir confrontaciones con traumas no resueltos, provocar angustia psicológica o generar crisis existenciales. La contención adecuada por parte de un facilitador experimentado es crucial para mitigar estos riesgos.
7. La ayahuasca es adictiva y genera dependencia (Falso)
Desde un punto de vista neurocientífico, la ayahuasca no genera dependencia química. No estimula directamente los sistemas dopaminérgicos relacionados con la adicción, como ocurre con sustancias como la cocaína o los opioides. Su uso tradicional es ritualístico y no compulsivo.
8. Cualquiera puede guiar una ceremonia de ayahuasca (Falso)
La facilitación de ceremonias de ayahuasca requiere conocimientos profundos sobre la preparación de la medicina, el acompañamiento ritual y la gestión de crisis psicológicas. Los guías tradicionales, conocidos en la cultura shipibo-konibo como onayas, se forman durante años para manejar estos aspectos. En contextos no indígenas, es fundamental que los facilitadores cuenten con formación en reducción de daños y protocolos de seguridad.
9. La ayahuasca es legal en todo el mundo (Falso)
La situación legal de la ayahuasca varía significativamente según el país. Mientras que en Brasil y Perú su uso está protegido dentro de contextos tradicionales, en otros lugares su legalidad es ambigua o restringida debido a la presencia de DMT, una sustancia fiscalizada internacionalmente.
10. Cuantas más sesiones se tengan, mayor será el aprendizaje (No es totalmente cierto)
La sabiduría y la integración de la experiencia con ayahuasca no dependen de la cantidad de sesiones, sino de la capacidad de reflexionar y aplicar los aprendizajes en la vida cotidiana. La integración psicológica posterior es crucial para que la experiencia tenga un impacto positivo a largo plazo.
11. La ayahuasca es adecuada para todas las personas (Falso)
Existen contraindicaciones médicas y psiquiátricas para el uso de ayahuasca. Personas con antecedentes de psicosis, esquizofrenia, trastorno bipolar no controlado, epilepsia o enfermedades cardiovasculares deben evitar su consumo.
12. No todo es ayahuasca (Verdadero)
En la medicina tradicional amazónica, la ayahuasca es solo una de muchas herramientas terapéuticas utilizadas en los procesos de sanación. Su uso suele estar acompañado por dietas específicas, tratamientos con otras plantas medicinales y prácticas de diagnóstico y curación realizadas por especialistas tradicionales. Reducir la medicina amazónica exclusivamente a la ayahuasca es una simplificación que ignora la riqueza y complejidad de estos sistemas médicos ancestrales.
13. La participación del paciente es activa en su proceso de sanación (Verdadero)
El proceso de sanación con ayahuasca no es pasivo. La confianza, la voluntad y el compromiso del paciente son fundamentales para que el proceso tenga éxito. En las tradiciones indígenas, se enfatiza la importancia de la intención, la apertura emocional y la integración posterior de la experiencia. Sin una actitud activa por parte del participante, los efectos terapéuticos pueden ser limitados o efímeros.
Conclusión
La ayahuasca es un recurso terapéutico y espiritual profundamente enraizado en las tradiciones amazónicas. Sin embargo, su uso requiere un abordaje informado y responsable. No es una solución rápida ni una experiencia recreativa, sino una herramienta que, en el contexto adecuado y con la preparación necesaria, puede facilitar procesos de transformación y autoconocimiento.
Desde una perspectiva académica y médica, es fundamental promover la educación sobre el uso seguro de la ayahuasca, garantizar el respeto por las tradiciones indígenas y fomentar la investigación científica sobre sus beneficios y riesgos. Si estás considerando participar en una ceremonia, infórmate adecuadamente, consulta con especialistas y elige un contexto seguro con guías experimentados.
Nota: Este artículo es de carácter informativo y no sustituye el consejo médico o profesional. Consulta con un especialista antes de participar en cualquier práctica terapéutica con ayahuasca.
Autores:
Douglas Tangoa (Onaya Shipibo - Konibo y psicólogo clínico)
Giancarlo Biaggi (Psiquiatra Transcultural y Psicoterapeuta junguiano)
Percy Bazan (Psiquiatra y Psicoterapeuta transpersonal)
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